La computación en la nube avanza a pasos agigantados convirtiéndose en la nueva normalidad para la TI empresarial. Particularmente, a medida que se incrementa la popularidad de los entornos multinube e híbridos aumenta su complejidad en cuanto a conectividad y seguridad, lo que puede suponer un desafío para muchas compañías, especialmente mientras están implementando la nube con la mayor celeridad posible.

En este proceso de transformación se introduce un concepto llamado “networking edge” como vía para responder a estos retos y gracias a la creación de un “nodo de red” en Interxion que permite a las empresas cambiar la arquitectura de sus redes para optimizar su conectividad híbrida y multinube.

En esta entrevista hablamos con Raquel Figueruelo, Marketing Manager & BDM de Interxion España, quien nos proporciona más detalles sobre este término reflejado en el Whitepaper de la compañía “Crear un nodo de red en tiempos de cambio”, además de explicarnos cómo preparar el nodo de interconexión de cara al futuro para gestionar el aumento del volumen de datos y la interconexión de las cargas de trabajo, entre otras cuestiones.


Un nodo de red permite a las empresas simplificar su infraestructura y juega un papel clave a la hora de satisfacer las crecientes demandas de red y datos a las que las empresas deben hacer frente


¿Por qué las empresas están creando nodos de red en los centros de datos hiperconectados?

La arquitectura de red de las empresas se diseñó para un entorno IT diferente al que ahora mismo tienen, para un entorno en el que los datos y las aplicaciones de la empresa no estaban dispersos sino en sus propios CPD. Conforme van creciendo las aplicaciones que se suben a la nube, las redes corporativas sufren tensión porque son más y más capilares, pues han de dar servicio a entornos más distribuidos. De igual forma, si las empresas además de aplicaciones suben datos de negocio a la nube pública, entonces estas tensiones son cada vez mayores pues la disponibilidad de los datos para sus usuarios genera más y más tensión y, consiguientemente, más y más coste.

Por ello, las empresas más avanzadas en su migración a la nube diseñan un nodo de red en un centro hiperconectado de manera que la red parta del centro de datos y concentre en un único punto todas las interconexiones, sea con los proveedores de cloud públicas, los operadores de telecomunicaciones o los proveedores de servicios gestionados, etc.

¿Cuáles son las ventajas del uso de nodo de red?

Te permite llevar tu red allá donde están todas, es decir, no haces que las redes vayan a ti y mejoras la capilaridad de la red sin tensiones, al tiempo que se reduce el coste y se minimiza la latencia.

¿La tendencia e incremento del uso de la nube es real? ¿Cómo está afectando este tema a la forma de consumir o almacenar los datos de una compañía?

Por supuesto, el uso de la nube es cada vez mayor y la generación de datos corporativos también.

Ambos hechos están generando que cada vez sean más necesarias infraestructuras hiperconectadas donde se intercambien esos datos de manera que la empresa conecte su core (su CPD corporativo), con su Edge (dispositivos donde se generan o donde llegan sus datos) y su nube (el lugar donde están sus apps y datos).

Un nodo de red es la solución para tener core, Edge y nube disponibles a un coste asumible.

¿Cuáles son los principales retos que enfrentan las empresas en el proceso de transformación y adopción de la nube?

Uno de los principales retos es la disponibilidad de sus datos en el tiempo y momento correcto (latencia). El acceso a los datos que necesito para poder seguir operando sea en los servidores de la empresa o en el dispositivo de un empleado o el dato alojado en la nube.

Otro son los costes de las comunicaciones derivados de ese reto de disponibilidad y accesibilidad. Los costes de la red no pueden superar a las ventajas de moverse a la nube.

El tercero es la seguridad, es decir, que mis datos estén accesibles no puede implicar brechas de seguridad.

La transformación digital de la mayoría de las empresas, y también su transición a la nube, se desarrollará en tres oleadas. ¿En qué consiste cada una de ellas?

La primera etapa es cuando las empresas empiezan a mover parte de su IT a la nube para no invertir en servidores. Se trata de un criterio centrado en la inversión, es decir, cambiar CAPEX por OPEX. Tras ello, empiezan a mover aplicaciones a la nube y, por último, mueven datos.

Es en estas dos últimas fases en las que la arquitectura de red sufre tensiones y crecen los costes.

¿Cómo preparar el nodo de interconexión de cara al futuro para gestionar el aumento del volumen de datos y la interconexión de las cargas de trabajo?

Las empresas generan cada vez más datos que se agregan, transmiten, procesan y vuelven a la rueda del ciclo de vida del dato para volver a agregarse, transmitirse y procesarse. Si en todo este proceso hay demoras y retrasos y el dato no está disponible, el negocio de la empresa puede verse afectado. Por ello, es bueno construir una arquitectura de red basada en el dato, que este esté disponible siempre con la menor latencia y eso es posible en un nodo de red en un centro de datos hiperconectado.

¿Cuál es el funcionamiento de Cloud Connect, la plataforma de interconexión multinube de Interxion? ¿Cuáles son sus beneficios más destacados?

Esta plataforma es una conexión privada y directa a cualquier cloud pública en Europa con una latencia mínima.

En este sentido, las ventajas que tiene Cloud Connect son las siguientes:

  • Multicloud: la misma conexión para llegar a AWS, Google, Azure, Alibaba, etc.
  • Coste: son VLAN (Virtual LAN), por tanto, no son caras.
  • El despliegue es inmediato, no se tardan meses como en las líneas internacionales.