La demanda de centros de datos en Europa solo se intensificará. De hecho, se prevé que los ingresos de los centros de datos europeos aumenten aproximadamente un 46 % para 2025, según el Informe del mercado de centros de datos europeos. Tras un par de años dominados por una serie de cierres sucesivos, esta noticia no debería sorprendernos. Después de todo, nos hemos acostumbrado a una vida digital bajo demanda. Desde el trabajo y la educación desde el hogar hasta el aumento del consumo generalizado de contenido digital y el comercio electrónico omnicanal: los nuevos mandatos digitales han colocado a los centros de datos en el centro de este entorno basado en datos.

Ventajas de implementar sistemas de monitoreo de centros de datos

En este contexto, los proveedores están escalando y fortaleciendo sus operaciones, y están implementando software de monitoreo de centros de datos para mejorar la eficiencia del rendimiento. El monitoreo del centro de datos logra esto al ofrecer a los equipos de TI y administración de instalaciones visibilidad sobre el estado de sus equipos en tiempo real. Sin esto, estarían limitados en su capacidad para evaluar y monitorear la condición de su equipo, así como cualquier problema crítico causado por errores humanos o mecánicos. En última instancia, esto conducirá a interrupciones, pérdida de ingresos y disminución de la satisfacción de los consumidores y las partes interesadas.

Brechas en el monitoreo del centro de datos

En este contexto, está claro que el monitoreo ofrece beneficios tangibles. Sin embargo, la dependencia exclusiva en el monitoreo seguirá dejando a los operadores de centros de datos expuestos a interrupciones, bajo rendimiento y riesgos comerciales y de reputación. Como tal, es imperativo que los gerentes de TI y de las instalaciones reconozcan y mitiguen las brechas en sus capacidades.

Por ejemplo, deben ser conscientes de que el monitoreo del centro de datos no los ayudará a preparar la instalación para el futuro. Esto se debe a que los sensores solo tienen visibilidad de las condiciones actuales del centro de datos, que no se pueden usar con precisión para predecir el futuro.

Además, sin sistemas de mantenimiento predictivo, las soluciones de monitoreo no pueden predecir la deficiencia mecánica. Las herramientas solo informarán a los administradores de centros de datos sobre su entorno existente; no pueden predecir el impacto del fracaso. En consecuencia, la única forma segura de monitorear la resiliencia sin un duplicado virtual es provocar el peor escenario de falla en su instalación operativa real. Por supuesto, esta no es una opción factible para los operadores.

Además, las soluciones de monitoreo no pueden observar en todas partes, ya que los sensores solo brindarán a los operadores información sobre la posición específica en la que se encuentran, creando una descripción incompleta y potencialmente engañosa. Por ejemplo, un solo sensor colocado en la parte superior de un bastidor no podrá informar con precisión a los operadores sobre las condiciones de cada pieza de TI montada en el interior.

Superando los desafíos en el monitoreo

Para cerrar estas brechas en el monitoreo del centro de datos, los operadores deben fusionar las herramientas que los asesoran sobre la forma histórica y actual de las instalaciones de su centro de datos. Invertir en dinámica de fluidos computacional (CFD) es fundamental para esto. CFD, el proceso de modelar matemáticamente un fenómeno físico aprovechando el flujo de fluidos y resolviéndolo numéricamente, permite a los operadores evaluar con precisión las condiciones ambientales en cualquier lugar que deseen, con detalles meticulosos.

A diferencia del monitoreo, CFD también se extiende más allá de los mapas de temperatura. Incorpora presión, humedad, fugas y velocidad del aire. Veamos el flujo de aire, como ejemplo. El flujo de aire puede ser predicho por CFD para mostrar su movimiento a través del centro, brindando a los operadores información sobre la causa de los problemas relacionados con la temperatura, mitigando el riesgo y aumentando la eficiencia operativa. Además, mientras que el monitoreo puede alertar a los operadores sobre problemas, no puede ofrecer la causa raíz del problema. Por el contrario, CFD puede simular la ruta del aire alrededor de un centro de datos. Por lo tanto, puede proporcionar a los gerentes de las instalaciones la razón por la cual. Esto significa que, en el futuro, los operadores pueden simular posibles soluciones para corregir el problema.

Otra ventaja clave de la simulación CFD es que permite a los administradores de centros de datos simular la resiliencia futura. En contraste con el monitoreo, una representación CFD 3D precisa ofrecerá inteligencia en torno a cualquier configuración de una instalación de centro de datos, incluidas las nuevas que aún no se han implementado. Por ejemplo, quienes implementen esta herramienta tendrán visibilidad sobre las temperaturas de entrada de los nuevos servidores, todo dentro del entorno simulado y antes de la implementación. Esto fomenta una mejor gestión del cambio y, una vez más, elimina aún más el riesgo.

Un dúo dinámico

El monitoreo del centro de datos y CFD no son tecnologías competidoras. Más bien, son soluciones simbióticas que brindan conocimientos críticos que el otro no puede. La combinación de las soluciones ofrecerá a los administradores de TI e instalaciones la máxima transparencia sobre el estado de sus equipos existentes, así como el impacto de las próximas implementaciones. Y, dada la creciente dependencia mundial de los datos, la transparencia es clave para administrar la capacidad del centro de datos, las nuevas implementaciones y las demandas cambiantes de los clientes.


Por Dave King, Product Manager de Future Facilities Ltd