Por Gail Stapleford, Directora de Recursos Humanos de CyrusOne

El sector del Data Center sufre una grave escasez de personal cualificado que, si no evoluciona a tiempo, no hará sino empeorar. Estadísticas recientes sugieren que la mitad del personal de ingeniería existente se jubilará en 2025, mientras que el personal necesario para gestionar los centros de datos del mundo pasará de unos dos millones a casi 2,3 millones en 2025, según el Uptime Institute.

Mientras el sector trabaja para identificar formas de mantener su plantilla actual y ayudar a aumentar la reserva de talento para el futuro mediante esfuerzos de contratación específicos, una oportunidad evidente para el sector es aumentar la representación de las mujeres que trabajan en data centers. El Uptime Institute informó el año pasado de que, a pesar de los avances, la proporción de mujeres en el sector de los centros de datos sigue siendo baja. Más de tres cuartas partes de los operadores de data centers encuestados afirman que su plantilla está formada por un 10% de mujeres o menos. Es más, casi uno de cada cuatro no tiene mujeres entre su personal de diseño, construcción y operaciones.

Ni que decir tiene que esto supone una enorme limitación en la escala potencial de quienes podrían estar cualificados para trabajar en el sector.

Mujeres en STEM

Aunque el sector ha manifestado su intención de diversificarse, hasta la fecha los avances han sido lentos y no existe una forma única y sencilla de conseguirlo. Según WES, solo el 46% de las chicas de 11 a 14 años se plantearían una carrera en ingeniería, frente al 70% de los chicos, pero esta cifra desciende aún más entre los 16 y los 18 años: solo el 25% de las chicas se plantean una carrera en ingeniería, frente al 52% de los chicos. Esto pone de relieve la importancia de la enseñanza desde la base, garantizando que las materias STEM capten el interés de las niñas en las primeras etapas de su educación y se cultiven a lo largo de toda su educación secundaria. Además, según un estudio de CrowdStrike, la falta de mujeres que enseñen y estudien materias STEM ha repercutido en la brecha de género y de competencias en sectores afines. Por ejemplo, en los cursos de informática, las mujeres solo representan el 13% de los estudiantes universitarios. El bajo número de mujeres en estos cursos significa que son menos las que consiguen trabajo en los departamentos de diseño, construcción y operaciones de la industria.

En general, se han dado pasos positivos para hacer frente a la escasez de personal cualificado en el sector de los data centers en el Reino Unido. Por ejemplo, el año pasado, la University Technical College Heathrow (UTC Heathrow) y techUK anunciaron que crearán la primera UTC de centros de datos del Reino Unido, en el marco del recientemente lanzado Digital Futures Program, una primicia en el sector. UTC Heathrow está rediseñando su plan de estudios existente para permitir a los estudiantes adquirir los conocimientos y habilidades esenciales necesarios para prosperar en carreras técnicas dentro del sector de centros de datos y añadirlo como una nueva opción de carrera, con CyrusOne confirmado como un socio clave para ayudar a definir el plan de estudios.

Sin embargo, como parte de la siguiente fase para abordar esta escasez, es imperativo que el sector apoye los esfuerzos que animan a las mujeres a participar en estos planes de estudios. Para acoger y retener a la próxima generación de profesionales cualificados, el sector debe esforzarse más por inspirar a los jóvenes talentos, especialmente en lo que respecta a la diversidad de género y raza, para que cursen materias STEM desde una edad temprana. La industria tiene un papel vital que desempeñar, desde involucrar a los estudiantes y concienciarlos sobre todas las apasionantes trayectorias profesionales en STEM, hasta apoyar iniciativas existentes como Girls in Data y Woman in Data, o crear programas de tutoría que apoyen a las mujeres en una industria dominada por los hombres.

Garantizar el futuro de los data centers sostenibles

La diversidad, la equidad y la inclusión son un imperativo empresarial que ayuda a construir y capacitar a los futuros trabajadores, al tiempo que aborda los retos sociales. La creación de data centers ecológicos, sostenibles y neutros en carbono es, sin duda, la prioridad número uno del sector. Conseguirlo dependerá, en parte, del desarrollo de una cantera de talentos disponibles y diversos, incluida una destacada representación femenina. Una mano de obra diversa es más creativa e innovadora, ambos componentes centrales para alcanzar los objetivos de sostenibilidad del sector.

El sector de los data centers siempre se enfrentará al reto de seguir el ritmo de la digitalización, pero la única constante para cimentar todo este cambio inevitable debe ser garantizar que la mano de obra esté capacitada para los problemas de hoy y de mañana, y esto no puede lograrse sin talento diverso.

La industria ha reconocido esta brecha de diversidad y la falta de representación femenina, lo cual es un paso importante. Ahora, debemos unirnos para solucionarlo.