¿Son los cables submarinos un elemento dinamizador para el sector del centro de datos?
En los últimos años, la capacidad de los cables submarinos ha aumentado en más del 30%. Especialmente en España, después de la reciente llegada del cable submarino MAREA; 6.600 km de cable que conecta Virginia Beach en USA con Sopelana, en el norte de España.
No tengo dudas de que estos cables desempeñarán un papel dinámico en el sector de los centros de datos; no solo localmente, sino globalmente. Este hecho, así como la pequeña cantidad de metros cuadrados cubiertos por los centros de datos en España, en comparación con otros países europeos, y la creciente demanda mundial, indican que el espacio para construir debe ampliarse para incluir centros de datos.
Pero, ¿se están construyendo grandes centros de datos en España?
Durante el último año, ha habido noticias de que un nuevo Hub de Centros de datos en el sur de Europa llegará a Madrid. Parece que se van dando pasos para que esto suceda con la aparición de nuevos “players” de centros de datos en España. Además, las empresas que llevan muchos años en la región también están construyendo más y más extensiones o nuevos edificios.
Lo que nadie sabía era si los Cinco Grandes (Facebook, Amazon, Google, Microsoft y Apple) iban a construir un centro de datos hiperescala en España. Pero recientemente, se ha confirmado que Amazon es el primero en anunciar la construcción de tres centros de datos en la región de Aragón en 2022.
¿Es cierto que los centros de datos corporativos desaparecerán y solo quedarán los hiperescala o edge?
Durante un seminario al que asistí hace varios años, recuerdo que los centros de datos se comparaban con el suministro de energía, que en cierta medida se remonta a la revolución industrial cuando todos tenían que construir su propia subestación.
Pero hoy, esto es impensable, para eso están las compañías suministradoras, y los centros de datos no serán diferentes. Dentro de 50 años, es probable que nadie tenga su propio centro de datos; en cambio, serán los centros de datos hiperescala los que proporcionarán el espacio para ubicar los datos.
¿Cuáles serán las grandes amenazas?
A nivel local, hay tres aspectos a considerar al construir un gran centro de datos. Primero, la burocracia involucrada, no solo centralmente, sino localmente. Todo depende de la forma de actuar de cada ayuntamiento; Unos pocos kilómetros pueden ser la diferencia.
En segundo lugar, como mencioné anteriormente, es el suministro de energía. Dependiendo de lo que se necesite, los proyectos pueden retrasarse más de dos años, y esto es demasiado tiempo en un mundo tan veloz. La velocidad y la certeza son clave a medida que las empresas líderes del mundo intentan ponerse al día con el aumento del uso de la nube.
En tercer lugar, los impuestos locales. En comparación con otros países, España puede no ser la región preferida debido a sus altos impuestos.
En términos de externalización, una amenaza global será la seguridad. Si las compañías administradoras de grandes centros de datos pueden mantener los datos seguros, ganarán la confianza del cliente.
Culturalmente, ¿las empresas están preparadas para externalizar sus centros de datos?
Por lo general, decimos que el centro de datos es el corazón del negocio en el que se producen todas las operaciones de la empresa y, por lo tanto, es un elemento crítico en su funcionalidad. Resulta difícil desprenderse de él.
Como suele ocurrir con los cambios, si el apartado de seguridad está solventado, cuando se produzca el cambio generacional y los Millenials sean los CIOs de las compañías, seguramente tomarán la decisión más rápidamente.
Mientras, tendrán mucho éxito las soluciones híbridas, teniendo, por ejemplo, un Data Center propio y otro externalizado.
Teniendo en cuenta todos estos puntos, ¿cuáles son los elementos clave durante la construcción de un centro de datos?
El nivel de disponibilidad, la flexibilidad al hacer propuestas innovadoras, la escalabilidad y la modularidad (lo que no significa necesariamente que construyamos con contenedores), la gestión energética de la infraestructura y la capacidad de proporcionar el servicio en el mínimo plazo posible, al tiempo que optimizamos el coste de operación.