El Estado requiere de una plataforma digital de primera línea, una que le permita estar interconectado de manera extraordinaria con todos sus departamentos, que funcione rápida y eficientemente, para así poder entregar el mejor servicio a todos los chilenos. Ante esta necesidad, la nube asoma como una gran opción.
En primera instancia, una rápida adopción del Cloud sigue pareciendo un desafío para las organizaciones, ya sea por realidad presupuestaria o incluso una comprensión básica de los procesos para concretar el cambio.
Sin embargo, la transformación digital sigue impulsando el paso a la nube, ya que la infraestructura de TI obsoleta, que es susceptible a ataques cibernéticos sofisticados, y la creciente demanda ciudadana de experiencias y servicios de calidad y expeditos, son motivos que exigen una modernización.
Según cifras del estudio “La nube alcanza un rol central en la innovación digital en Chile y Sudamérica” de IDC, entre 2019 y 2024, las empresas de Chile se volcarán al cambio y pasarán de un predominio de despliegues de software on-premises, al cual destinan más del 80% de la inversión, a una arquitectura donde el 44% del gasto en software esté dedicado a esquemas de servicios en el Cloud público.
Por su parte, el proceso de avance de la infraestructura virtual del gobierno ha empezado a dar sus primeros pasos con la Ley de Transformación Digital del Estado, la cual, a través de la innovación, el uso estratégico de tecnologías y la colaboración, busca forjar un Estado moderno, que contribuya en mejorar la calidad de vida de las personas.
Las soluciones tecnológicas presentes en la nube permiten a los gobiernos optimizar el desarrollo, la implementación y la entrega de nuevos servicios, lo que también se traduce en ahorrar tiempo y dinero.
El potencial es infinito y podemos encontrar muchos ejemplos en el mundo. Uno que me parece realmente interesante es el del condado de Los Ángeles en EE. UU. que es el más grande del país con más de 10 millones de habitantes. El condado decidió pasar de un software on-premise a aplicaciones basadas en la nube de Oracle para administrar los registros fiscales de los ciudadanos. El proyecto modernizó por completo el funcionamiento del sitio oficial del condado, que brinda acceso de búsqueda a registros, mapas y fotos, utilizados por 12 departamentos involucrados en el sistema de impuestos a la propiedad, desde el tesorero y el recaudador de impuestos hasta el departamento de salud pública.
Hasta ahora, los resultados han sido impresionantes. El modelo de pago por uso para su infraestructura en la nube generó ahorros de costos en comparación con el enfoque de mantener su propio centro de datos. Adicionalmente, aprovecharon la tecnología para ofrecer a sus ciudadanos nuevas capacidades, como contar con un asistente digital para ayudar al público a obtener respuestas rápidas a las preguntas sobre impuestos a la propiedad.
Hoy en Chile, con la Región de Nube Pública instalada por Oracle en el país, el gobierno, los municipios, los hospitales públicos, las universidades y cualquier organización independiente de su tamaño, tienen la posibilidad de echar andar este tipo de proyectos aprovechando la rapidez, la flexibilidad y la seguridad que brinda la Nube, para responder a las altas expectativas de los ciudadanos que quieren experiencias personalizadas y simples.
Por ende, es importante entender que en este proceso de transformación, el Cloud le tiende la mano a las organizaciones, y las acompaña en el camino del cambio, uno que trae consigo mejoras y avances en materia de ciberseguridad, analítica de datos, automatización, inteligencia artificial, machine learning y tantas otras. Con ellas un nuevo precedente en el largo tramo hacia un Estado Digital, y también, hacia un mejor país.