Un consorcio de 16 organizaciones europeas recibirá 20 millones de euros de financiación de la Unión Europea para construir el primer sistema de computación exaescala del mundo.

El proyecto EuroEXA será llevado a cabo por equipos del Reino Unido, Grecia, España, Bélgica, Suecia, Holanda, Italia y Alemania.

El sistema se pondrá a disposición de las comunidades científicas, la industria y los miembros del sector público en toda la UE y se utilizará en aplicaciones como la climatología, la meteorología y la bioinformática.

Las organizaciones fueron seleccionadas a través de un proceso competitivo basado en las tecnologías y capacidades que podrían aportar al proyecto. En el caso español, será el Barcelona Supercomputing Center (BSC) quien colabore en este proyecto a exaescala.

Otros organismos y compañías que participan en la iniciativa son la Universidad de Manchester, ARM, Iceotope, el Centro Europeo de predicciones meteorológicas a medio plazo (ECMWF) o el Instituto Nacional de Física Nuclear de Italia.

El proyecto será financiado con el programa de investigación e innovación de la UE, Horizon 2020, específicamente con el presupuesto para el co-diseño de sistemas y aplicaciones HPC.

Los objetivos de EuroEXA incluyen el desarrollo y despliegue de un sistema de procesamiento de tecnología ARM Cortex con aceleración de Xilinx Ultrascale y FPGA, alcanzando el nivel de peta-flop para 2020 y utilizando este sistema exaescala entre 2022 y 2023.
"Para satisfacer las demandas de la próxima generación de computación y de HPC a exaescala, no es posible simplemente optimizar los componentes de la plataforma existente. En EuroEXA, hemos adoptado un enfoque holístico para romper las ineficiencias de las abstracciones históricas y aportar innovación y co-diseño significativos en toda la pila informática", apuntó John Goodacre, catedrático de arquitecturas informáticas de la Universidad de Manchester.

El proyecto se enfrenta a varios retos. “Tenemos límite en la distancia que puede haber de un servidor a otro, y tenemos que poner 60 MW en un centro de datos. Parte del reto fue que los servidores no deben estar a más de 50 metros de distancia en un espacio muy pequeño, y creemos que podemos llegar a los 35 metros", afirma Peter Hopton, fundador de Iceotope y responsable de difusión de EuroEXA.

"En promedio, los racks de un centro de datos se ajustan a unos 5 kW. Nosotros hemos logrado encajar unos 200 kW por gabinete”, lo que han conseguido al reducir el tamaño del rack.