El Edge computing o cómputo al borde es una herramienta surgida tras la necesidad de generar la toma de decisiones en tiempo real. Esta herramienta tiene como fundamentos el procesamiento y almacenamiento de datos de aplicaciones en la nube, de la manera más cercana posible al usuario. El término en inglés “Edge”, significa borde y hace referencia directa al traslado y uso de la computación al límite. 

Los dispositivos que hoy en día funcionan con base en IoT, generan miles de datos en tiempo real, para poder disponer correctamente de los mismos se tendrá que contar con una infraestructura correcta y de alta disponibilidad. Es por esto que las redes 5G están siendo implementadas con más frecuencia que antes, al contar con mayor ancho de banda. 

El Edge computing ha ganado popularidad últimamente, debido a las diferencias en costos y ahorro en el largo plazo, esto en comparación de los modelos tradicionales de procesamiento y almacenamiento de la información. Para simplificar lo que hemos estado mencionando a lo largo de la presente nota, el Edge computing busca reducir el número de procesos en la nube, al mismo tiempo que se trabaja en mudar estos procesos a dispositivos locales Edge que almacenan y trasladan la información a un sitio más cercano al usuario, reduciendo las comunicaciones de largas distancias entre el usuario y el servidor.

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Es necesario mencionar que la mayoría de las tecnologías en la actualidad se fundamentan en el cómputo al borde, algunos ejemplos de esto es la Inteligencia Artificial y Big Data. Las aplicaciones que son más utilizadas en el día a día son los asistentes virtuales, mismos que requieren de solucionar solicitudes desde la nube. La seguridad de la información en las comunicaciones es otra virtud dentro del Edge computing; esto es debido a que se reducen los dispositivos conectados a la red, disminuyendo los riesgos de un ciberataque. Además, se genera el procesamiento de manera local de la información; lo que permite su envío y traslado de manera confidencial en una sola red.

Se considera que para el año 2023 el 50% de los centros de datos estén ubicados en instalaciones críticas al borde, por lo cual las arquitecturas híbridas se posicionarán en primer plano y en conjunto de los servicios en la nube se generará una parte fundamental de la estrategia de TI en las organizaciones.

En conclusión, resulta importante mencionar la importancia que tiene hoy en día una correcta implementación del Edge computing en un centro de datos, misma tecnología que hace de nuestro centro de datos uno más eficiente y de alta disponibilidad.