Para el año 2025, el 80% de las empresas habrá cerrado su centro de datos tradicional, frente al 10% actual que ya lo ha hecho, tal como indica el analista de Gartner Dave Cappuccio en un blog.

Según el profesional, en un entorno en el que las TI están cambiando radicalmente, el centro de datos tradicional se ve relegado a ser un área legacy, dedicada a servicios muy específicos que no pueden ser soportados en otro lugar o para ejecutar aquellos sistemas que son más eficientes económicamente on-premise.

Pero a medida que proliferan los servicios de interconexión, los proveedores de servicios en la nube, el IoT o el edge, permanecer en una topología de centro de datos tradicional tiene ventajas limitadas. No se trata de un cambio de la noche a la mañana, sino de un cambio evolutivo en la forma de entregar los servicios.

Esta evolución tendrá cuatro impactos principales, según Cappuccio.

1.- La ubicación de la carga de trabajo en una infraestructura digital se basa en las necesidades del negocio, y no está restringida por la ubicación física.

Muchas organizaciones que están desarrollando estrategias de infraestructura digital están luchando con el tema de la adopción de la nube. “Los líderes de I&O (Infraestructura y Operaciones) están comenzando a desarrollar estrategias de TI con un enfoque en su cartera de aplicaciones, en lugar de en la infraestructura física”.

Con el rápido crecimiento de soluciones IoT, entornos de computación edge y TI “no tradicional”, muchas organizaciones están reconsiderando la ubicación de ciertas aplicaciones en función de la latencia de la red, los clusters de población y las limitaciones geopolíticas (por ejemplo, el Reglamento General de Protección de Datos de la UE).

2.- Un ecosistema de partners ayudará a habilitar infraestructuras escalables y ágiles.

“Una tendencia emergente en el mercado de colocation ha sido la introducción de servicios mejorados que van más allá de la energía, el espacio y los servicios de soporte tradicionales. Entre estos servicios se incluyen la neutralidad de operador, servicios habilitados para la nube, conexiones cruzadas a socios en las mismas instalaciones o interconexión de fabrics a otros sitios o servicios”.

Al usar estas fabrics, los clientes empresariales podrían tener acceso a muchos proveedores y servicios diferentes. No obstante, moverse entre proveedores no es una tarea simple. Se espera que los proveedores de colocation ofrezcan una capa SDN por encima de estas fabrics, proporcionando así un mecanismo sin fisuras para moverse entre servicios para sus clientes. “De esta manera, los proveedores de colo podrían convertirse en una parte integral de su infraestructura digital”, apunta Cappuccio.

Asimismo, la localización de los datos, los requisitos regulatorios (como el GDPR) y requerimientos como una baja latencia pueden impulsar la necesidad de que las cargas sean accesibles desde múltiples localizaciones. Un ecosistema de partners que admita servicios de interconexión sólidos puede ser un habilitador clave para estas cargas de trabajo.

3.- La gestión de infraestructura digital distribuida será clave para que I&O haga una transición exitosa hacia el negocio digital.

En entornos distribuidos con una combinación híbrida de fuentes y arquitecturas, la ubicación física de un activo (o proceso) no estará claramente definida. El equipo de I&O sigue siendo responsable tanto de los activos como de la experiencia del usuario final, y necesitará herramientas para monitorear y administrar activamente cualquier activo o proceso, en cualquier lugar y en cualquier momento.

El impacto de la digitalización se puede observar mejor en la aparición de tecnologías de monitoreo cada vez más relevantes que admiten funciones de gestión de la experiencia y de automatización de la entrega. Esto es fundamental para permitir que los equipos de administración de operaciones de TI (ITOM) gestionen un conjunto diverso de tecnologías en continuo crecimiento.

4.- La gestión del talento TI y la recapacitación del personal hacia la versatilidad son factores de éxito críticos.

Los líderes de I&O se enfrentan a un desafío aparentemente imposible: desarrollar las habilidades de su personal para cumplir con la demanda del negocio, en medio de un nivel nuevo y desconocido de complejidad de la infraestructura. Deben implementar, comprender y soportar nuevas capas de integración, orquestación, personalización y configuración, al tiempo que los equipos existentes deben entregar lo que han estado haciendo hasta la fecha, pero también encontrar formas de trabajar en armonía con los demás en un entorno bimodal.

“Es necesario que los líderes de TI desarrollen la versatilidad del personal, complementando la experiencia vertical con las capacidades adicionales necesarias”. En las infraestructuras digitales distribuidas, las habilidades adicionales requeridas incluyen dos áreas críticas: el conocimiento del negocio y el conocimiento del proveedor.