Una revolución socioeconómica mundial: en estos términos es cómo se refieren los expertos al hablar del cambio que supone la llegada del 5G. Las redes de quinta generación aportan un gran valor añadido a las organizaciones y la vida tal y como se conoce.
Una de las principales ventajas que presenta el 5G respecto a las generaciones anteriores es que proporciona velocidades más rápidas, latencia ultrabaja, permiten conectar un mayor número de dispositivos al mismo tiempo (desarrollo del IoT), mayor fiabilidad, privacidad, seguridad y disponibilidad – todos fundamentales para cualquier empresa. Por tanto, los dispositivos preparados para funcionar con la red 4G no se van a quedar obsoletos con la introducción del 5G, sino que mejorarán.
Además, ayuda a aumentar la competitividad a nivel mundial gracias al desarrollo de nuevos casos de uso en diversas industrias como manufactura, medicina, automoción, educación, entretenimiento, entre muchos otros.
Implementación y uso de 5G en Latinoamérica
El despliegue de la tecnología de quinta generación ha comenzado, si bien algunos países de la región están más avanzados que otros, existe una gran expectativa sobre lo que el 5G puede ofrecer.
Según proyecta la consultora Omdia, se estima que 5G se duplique a 1.300 millones de conexiones en este 2022 y casi se vuelva a duplicar de nuevo en 2023 a 2.000 millones de conexiones y alcance las 4.800 millones para finales del año 2026. De esto, se prevé que 516 millones provengan de Norteamérica y 301 millones de Latinoamérica y el Caribe.
José Otero, vicepresidente para el Caribe y América Latina de 5G Américas, afirma en un comunicado que las implementaciones de 5G continúan avanzando en América Latina a medida que los reguladores asignan nuevo espectro. “La nueva generación de comunicaciones móviles ofrece muchas características tecnológicas que serán bienvenidas por los ciudadanos de la región a medida que aumente la cobertura 5G. En general, 4G LTE brindó una banda ancha móvil excelente durante el momento difícil de la pandemia que ha enfatizado la importancia de los servicios de comunicaciones confiables”.
5G Américas rastrea la cantidad de implementaciones de redes 5G a partir de los datos proporcionados por TeleGeography y representan las redes comerciales en vivo en la actualidad que se ajustan a la definición de 5G y los estándares 3GPP. En el mes de julio de 2022 había 26 implementaciones de redes 5G en América Latina.
En función del país, el panorama de implementación y uso de redes 5G va cambiando. Sonia Agnese, analista principal senior de telecomunicaciones y medios de Omdia vislumbra que hay un proceso de aceleramiento y despegue de 5G en América Latina con casos como los de Chile, Brasil, República Dominicana, entre otros. En Chile ya se ha lanzado el servicio. Por otro lado, en Brasil, TIM lanzó la primera red 5G Stand Alone en Brasilia. Según la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), tras el inicio de los servicios en Brasilia, las redes 5G deberán comenzar a estar disponibles gradualmente en las otras 26 capitales regionales antes del mes de octubre. Mientras que en México, Telcel lanzó en febrero su red 5G que ya cubría 48 millones de personas y espera alcanzar a 120 ciudades conectadas a la red de quinta generación al fin de 2023, actualmente la más amplia de América Latina.
“En Omdia esperamos que a partir de 2023 5G comience a ganar impulso aupado por la adopción de nuevos smartphones habilitados para 5G a menor precio. Los datos históricos muestran que cada nueva generación tiene una adopción más rápida que la anterior. Los ciclos de innovación son más cortos y América Latina es una región resiliente que se recupera más tarde pero a mayor velocidad. Estimamos que el 10 % de las conexiones móviles serán 5G para fines de 2023 y alrededor del 35% del total de conexiones para 2026 en la región”, explica Sonia Agnese.
¿Cómo el 5G impactará en las infraestructuras de los data center? ¿Qué principales cambios impulsarán?
“Los datos son el actual petróleo, y cuidar de ellos, tanto en su procesamiento, almacenamiento como en asegurarlos y “disponibilizarlos” de cara al negocio de los clientes que cada vez más incorporan tecnologías como el 5G con altas tasas de transferencia y latencia mínima, se transforma en una necesidad imperiosa”, explica Christian Barrera Alvear, Associate Partner - NGN, 5G & Edge Computing - Kyndryl Chile.
Por su parte, Sonia Agnese se remonta años atrás para explicar que históricamente los operadores contaban con sus propias infraestructuras de data centers y las empresas de telecomunicaciones están evolucionando a modelos más livianos donde contratan servicios de nube de terceros con una estrategia multicloud.
Como se ha mencionado anteriormente, la gran cantidad de datos que las redes 5G deben procesar, almacenar y distribuir puede generar tensión en los centros de datos. Por ello, la experta de Omdia asegura que aumenta la demanda de capacidad informática y las infraestructuras asociadas, como el almacenamiento, la conectividad y el Edge computing.
“En este sentido vemos cómo algunas empresas están ya directamente tercerizando el manejo de su red como el caso de AT&T con el acuerdo realizado en 2021 con Microsoft. Esto muestra una mayor especialización del sector de telecomunicaciones, un sector que experimenta la duplicación de datos transportados cada dos años en promedio y que, con las tecnologías de realidad virtual y el metaverso, se vislumbra un aceleramiento del tráfico y la cantidad de información transportada por el impacto del Internet de las cosas”, agrega Agnese. Adicionalmente, las tecnologías abiertas open-RAN y las redes privadas virtuales, plantean desafíos y oportunidades para los data centers. Por todo ello, concluye que esto requiere que los data centers incrementen los procesos de actualización por ciclo de vida reemplazando el hardware de red por equipos más simples y que a la vez sean compatibles con 5G, preparándose para la virtualización de las funciones de red y las redes definidas por software, garantizando que puedan manejar el aumento de la carga de trabajo.
Mientras que por su parte, Alfonso Cueto Aguirre, Platform Operations Director de KIO Networks, considera que: “Los centros de datos requieren evolucionar en sus comunicaciones y en las infraestructura como servicio (IaaS) constantemente debido al crecimiento exponencial que ha tenido la nube, donde un concepto específico denominado Edge Cloud tiende a respaldar muchas de las funciones que estarán demandando los despliegues de 5G, así como sus casos de uso. El desafío de atender la demanda es clave para los centros de datos que deban actualizar sus capacidades para garantizar el aprovechamiento de las ventajas de 5G”. El experto coincide con Sonia Agnese señalando que una de las ventajas de 5G es que se pueden desplegar redes privadas, considerando esto un caso de uso es el despliegue de cobertura 5G desde los centros de datos, eso quiere decir que el tráfico no esté sobre una red pública, el tráfico empresarial o de propósito específico llegará a los centros de datos de forma directa. Esto supone que los data centers podrán ofrecer una red extendida a sus clientes aprovechando las comunicaciones 5G.
El 5G impacta de varias maneras. Por un lado, se tienen que procesar mayor cantidad de información y los procesos que se ejecutan son más exigentes a nivel técnico, por lo que los data centers existentes deben tener esto en cuenta en sus estrategias y aumentar sus recursos informáticos disponibles para almacenar y administrar el aumento exponencial de datos que traerán las redes 5G.
Debido a un mayor ancho de banda, las redes 5G mejoran la eficiencia de los datos y pueden incrementar la velocidad con la que proporcionan la información a los usuarios casi 100 veces. Este hecho provocará que los data centers introduzcan operaciones que puedan administrar datos que consumen muchos recursos sin comprometer el consumo y el costo de energía. Por tanto, el impacto de 5G en la infraestructura del data center seguirá centrándose en optimizar la eficiencia, la confiabilidad, la resiliencia y la seguridad mientras se satisfacen las crecientes demandas de datos y redes.
La arquitectura tradicional del centro de datos deberá actualizarse para acercar la computación y el almacenamiento al usuario final. Es decir, se replantea la estructura de los data centers. Estos requisitos hacen que las empresas tengan que trasladar su infraestructura de IT al edge (edge computing) o borde, cerca de los usuarios que utilizan estos servicios. Por lo que se necesitarán más edge data centers.
¿En qué otras tecnologías se apoya o necesita el 5G para su desarrollo?
Además de que los edge data centers ganarán terreno y serán claves para el rendimiento del 5G. El salto, en términos de calidad y velocidad de la red será significativo. Según indican desde la consultora IDC, para 2023, más del 50% de la nueva infraestructura de TI corporativa se implementará en estructuras de borde, reemplazando los centros de datos corporativos.
El 5G es un catalizador de la innovación y se trabaja en diversas iniciativas incorporando tecnologías tales como el Internet of Things, la inteligencia artificial, blockchain, entre otros. Alfonso Cueto Aguirre indica al respecto que: “Las tecnologías que vemos con un foco relevante para el desarrollo de 5G adicionales a los que la propia tecnología está impulsando son Inteligencia Artificial, Industria 4.0, Realidad Aumentada, Metaverso, Gaming e Internet de las cosas (IoT) para lo cual las capacidades de cómputo continuarán su crecimiento, el uso de más y mejores dispositivos implica que el esquema de redes IPv6 es fundamental para cualquier uso masivo de estas tecnologías”.
Por su parte, Christian Barrera de Kyndryl pone sobre la mesa un dato de GSMA Intelligence que proyecta que al cierre de 2022 habrá 1.000 millones de líneas móviles con 5G en el mundo, cifra que se duplicará para 2025. Así, teniendo esa cifra en cuenta, las tecnologías que se más se desarrollarán están relacionadas con:
- El mercado de los hyperscalers, no sólo ya cuentan con una interesante presencia en Latinoamérica, sino que claramente continuarán avanzando con la inauguración de nuevas “regiones”, que es la forma de acercar el cómputo y el almacenamiento a las zonas de mayor densidad poblacional, léase metrópolis, así como ciudades altamente desarrolladas tecnológicamente. Esta competencia irá en directo beneficio de los clientes finales.
- La conectividad, o a estas alturas hiperconectividad, mediante Fibra Óptica especialmente hacia los Data Centers, así como hacia las estaciones/antenas de 5G.
- El desarrollo y auge de Edge Computing, mencionado anteriormente, está llevando la capacidad de cómputo y la toma de decisiones empresariales e industriales a la Planta, que es donde realmente se necesita, así como las aplicaciones de Negocio que se implementen, como es el caso de los camiones autónomos en Minería; o podría ser la detección de incendios en Forestales utilizando Inteligencia Artificial; o la trazabilidad de los diferentes productos, así como la cadena de frío en Salmoneras, sin descuidar las variables críticas, además de la seguridad física y lógica en Eléctricas, o finalmente para el ejemplo, la medición de PH, entre otras, para empresas Sanitarias o de Aguas.
- Del mismo modo, si aún no lo han hecho, las empresas deberán integrar experiencia, servicios y tecnologías de red definidas por software, como SDN, SD-WAN, SD-Access y SD-MultiCloud, entre otras.
- Finalmente, mediante el aprovisionamiento de servicios de borde definidos por software y habilitados para 5G, se pueden vincular los dispositivos del usuario final, la entrega de aplicaciones basadas en la nube, las opciones de alta seguridad y los servicios de red innovadores y, así acompañar a los clientes a construir en una red altamente programable.