Ricardo Fornari, Director General de Deerns, será uno de los participantes del evento DCD>Connect Cancún 2023, que ocurre los próximos 26 y 27 de septiembre en el Hard Rock Hotel Riviera Maya. Él participará del debate "¿Qué limita verdaderamente la capacidad de los Data Centers: el espacio, la energía o la densidad?". DCD habló con Fornari sobre la temática.

¿Cuáles son los principales desafíos que enfrentan los Data Centers en términos de disponibilidad de espacio y cómo pueden abordarse a largo plazo?

Para que un terreno sea considerado apto para la implementación de un data center, debe cumplir con una adecuada combinación de numerosos requisitos, entre los que podemos mencionar: infraestructura energética, conectividad, proximidad a los usuarios, incentivos gubernamentales, madurez en los procesos de licenciamiento, como ambiental, energía, construcción y operación, clima suave, proximidad a mano de obra calificada, buena calidad del aire, buena infraestructura vial, baja criminalidad, entre otros.

Al observar estos criterios, es natural inferir que la selección de terrenos para la implementación de centros de datos en la región latinoamericana es particularmente compleja. Con el reciente expresivo crecimiento del sector, los precios de los terrenos han aumentado significativamente en regiones que convergen los criterios tradicionales (disponibilidad de energía, proximidad a grandes concentraciones urbanas, conectividad y disponibilidad de mano de obra calificada).

El apoyo gubernamental, a través de inversiones en infraestructura, incentivos, agilidad en licenciamiento y apoyo a la capacitación de mano de obra calificada, combinado con la formación de asociaciones como MEXDC y ABDC, que buscan unir a los diversos actores del sector en favor de su desarrollo, son fundamentales para aumentar la disponibilidad de espacio de calidad para la implementación de centros de datos.

¿Cómo pueden los Data Centers mantener un equilibrio entre la creciente demanda de energía y la necesidad de ser sostenibles desde el punto de vista medioambiental?

En primer lugar, es esencial desarrollar una planificación estratégica para una concentración adecuada de equipos de potencia. Esta planificación consiste en escalonar los campus y edificios del centro de datos considerando factores como la demanda, la disponibilidad de energía, la logística de equipos, entre otros. Esta concentración trae la posibilidad de escalabilidad controlada y la posibilidad de utilizar equipos con mayor eficiencia.

La inversión en fuentes de energía renovables también es relevante a este respecto. Brasil es un ejemplo importante porque, además de tener una tradición de décadas de uso de centrales hidroeléctricas en la generación de energía (60% en 2022), ha logrado grandes avances en su matriz energética con otras energías verdes, como la solar (casi 3%) y la eólica (más del 11%).

Todavía en este campo, hay un esfuerzo mundial para permitir cada vez más el uso de celdas de combustible en soluciones de data centers. La cuestión sigue siendo obtener el llamado hidrógeno verde en una escala suficiente para permitir el funcionamiento constante de un centro de datos. Pero esta tecnología ya se está aplicando a pequeña escala, evitando los generadores que queman combustibles fósiles.

Finalmente, invertir en tecnologías para mejorar la eficiencia energética en los centros de datos y reducir su huella ambiental es de igual importancia y relevancia. Además del uso de procesadores más eficientes, mayor densidad y concentración de cargas, el principal desarrollo tecnológico que permitirá satisfacer la creciente demanda de altas potencias es el uso de sistemas HVAC que utilizan refrigeración líquida.

Esta tecnología no es nueva, y cada vez se utiliza más por la necesidad de rechazo de carga térmica a densidades que superan los 30kW por rack. Tenemos varios tipos de refrigeración líquida, desde tipos en los que no se requieren cambios en los servidores y que utilizan un intercambiador de calor con agua en la parte posterior de los racks hasta soluciones más diferentes donde los servidores están completamente sumergidos en líquidos no conductores. Otra opción es el uso de "placas clod" donde el líquido que enfriará los servidores está dentro de los servidores y el intercambiador de calor está más cercano de la fuente de calor.

¿Qué estrategias están implementando los Data Centers para adaptarse a las demanda de mayor densidad y cargas de trabajo más intensivas?

Desde el punto de vista del diseño de ingeniería, el uso eficiente de los espacios del centro de datos consiste esencialmente en soluciones que optimizan la distribución mecánica y eléctrica al satisfacer las necesidades especificadas por los clientes con el uso más eficiente del espacio. Una de las soluciones que podemos adoptar es concentrar los equipos que normalmente se utilizan de forma aislada y combinarlos en un solo equipo, haciendo que las distancias entre los equipos sean lo más mínimas posible.

Los enfriadores con bombas internas ilustran muy bien este ejemplo. Soluciones como esta aumentan la densidad y disminuyen la huella que utiliza este sistema, ganando así más eficiencia en el uso del espacio del centro de datos. Otro punto que podemos utilizar para maximizar la eficiencia en el uso de los espacios del centro de datos es el uso de ubicaciones externas para el posicionamiento de los equipos, especialmente si estos equipos formarán parte de una fase futura. Algunos ejemplos son el techo o incluso el área exterior de la planta baja del centro de datos, donde los equipos pueden exponerse a la intemperie o aislarse en contenedores, resistentes a la intemperie.

Otra opción en la búsqueda de un mayor aprovechamiento del espacio a la hora de diseñar un data center es el uso de bloques de potencia más grandes para minimizar la cantidad de equipos a utilizar en la topología del data center. Por otro lado, esta solución trae un mayor desafío en la disponibilidad de equipos y en la logística de suministro e instalación.

Se ha demostrado que la parte de enfriamiento es un factor limitante para aumentar la densidad de los centros de datos (lo que resulta en un mayor procesamiento en un área más pequeña). Pero ya se están presentando algunas soluciones y los propios fabricantes de procesadores están desarrollando productos para que el aumento de esta densidad (que hoy gira en torno a los 20kW por rack) a casi 100 kW por rack en los próximos años.