Investigadores de Hong Kong han probado un disipador térmico mejorado para equipos electrónicos, que utiliza agua salada, en un proceso similar al que utilizan los animales sudando.

El grupo, dirigido por Wei Wu de la Escuela de Energía y Medio Ambiente de la Universidad de la Ciudad de Hong Kong, probó un disipador de calor que contenía un pequeño tanque de solución salina confinado por una membrana porosa a través de la cual sólo podían pasar moléculas de agua.

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El disipador de calor higroscópico encapsulado en membrana cargado de sal (HSMHS) – Wei Wu / Device

Las moléculas de agua que salían del tanque produjeron un efecto de enfriamiento "desorción" similar al proporcionado en el enfriamiento por evaporación. Cuando se apaga el sistema electrónico, la solución reabsorbe moléculas de agua, regenerándola para uso futuro.

"El proceso es el mismo que utilizan los mamíferos, quienes sudan para refrescarse", anotó el equipo.

"Seleccionamos bromuro de litio como sorbente rentable para evitar la cristalización", informa el grupo en un artículo para Device. El equipo descubrió que su disipador de calor podía proporcionar refrigeración de hasta 75 kW por metro cuadrado, durante casi siete horas (400 minutos), mejorando el rendimiento de los componentes electrónicos que enfriaba en casi un 33 por ciento.

"La estrategia puede resultar útil para diversas aplicaciones que necesitan una regulación térmica intermitente, con pocas barreras tecnológicas", afirma el equipo.

El grupo propone una estrategia de refrigeración pasiva que podría ser mejor que la refrigeración activa, que depende de dispositivos externos como ventiladores y bombas. Por el contrario, la refrigeración pasiva se puede realizar sin emisiones adicionales, en un espacio más pequeño y con poco mantenimiento.

El equipo probó tanto el cloruro de litio como el cloruro de bromo en su disipador de calor higroscópico encapsulado en membrana cargado de sal (HSMHS), demostrando que el sistema no tenía fugas ni causaba corrosión.

Crearon un disipador de calor y lo colocaron en la CPU de un dispositivo informático real (un ODROID-XU4), mejorando el rendimiento en un 32,65 por ciento en comparación con el ordenador enfriado por un disipador de calor convencional.

"La estrategia propuesta muestra una rentabilidad récord para la comercialización", concluye el artículo del equipo. "Nuestra estrategia de refrigeración es rentable y altamente escalable, lo que puede ser útil para diversas aplicaciones de refrigeración con pocas barreras tecnológicas".

Además de seis científicos de la Universidad de la Ciudad de Hong Kong, el grupo incluía a un investigador de la Escuela de Energía e Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong, Wuhan, China.

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El ordenador ODROID-XU4, con el HSMNHS y su disipador térmico original, junto con un gráfico de temperatura e imágenes térmicas que muestran una relación de refrigeración mejorada – Wei Wu / Device