Google está listo para adquirir la startup de migración a la nube con sede en Tel Aviv, Alooma. La principal misión de la compañía es ayudar a las empresas a optimizar la migración de su base de datos a la nube, a través de una herramienta de canalización de datos que permite exportar la información desde múltiples fuentes a un único almacén.

El precio de la adquisición no ha transcendido, aunque según el portal financiero Globes, fuentes del mercado estiman que la cantidad podría oscilar entre los 100 y los 150 millones de dólares.

Un paso más allá

La compra de Alooma por parte de Google podría verse como un esfuerzo para situarse al mismo nivel que los rivales más grandes en el ámbito cloud: Amazon y Microsoft. A finales de 2018, Google Cloud tenía solo el 8,5% de cuota de mercado de la nube, según Canalys. En el mismo período, Amazon Web Services contaba con un 31,7% de mercado y Microsoft Azure un 16,8%.

“Las compañías líderes en todas las industrias y en todo el mundo se están moviendo a la nube para ser más ágiles, seguras y escalables”, comentaba Amit Ganesh, vicepresidente de Ingeniería de GCP, y Dominic Preuss, director de Gestión de Productos, a través de una publicación en un blog el pasado martes. “Una de las cosas que más nos entusiasma de Alooma es la gran experiencia que tiene tanto en las bases de datos de fuente abierta como en las empresas. Este conocimiento que su equipo trae a Google Cloud será fundamental para ayudarnos a desarrollar capacidades de migración adicionales dentro de Google Cloud Platform”, apuntaban los ejecutivos.

Fundada en 2013 y con sede en Tel Aviv, Alooma ha recaudado unos 15 millones de dólares hasta la fecha gracias a inversores como Lightspeed Venture Partners y Sequoia Capital. Las filiales de Google Cloud en Israel incluyen Velostrata, firma que fue adquirida el verano pasado por el gigante tecnológico.