Desde inicios de 2017, se ha comenzado a producir energía, aprovechando la luz solar, para la red eléctrica que alimenta el centro de datos de Google en Quilicura, Chile, y las oficinas de la compañía en el país.

“Estamos contentos de anunciar que los primeros rayos de sol del 2017 comenzaron a producir energía para la red eléctrica que alimenta nuestro centro de datos en Quilicura, Chile, así como nuestras oficinas en ese país”, apunta Sam Arons, líder de ingeniería e infraestructura de Google.

Ya en 2015, Google anunció que había llegado a un acuerdo con la empresa española Acciona para proveer a la instalación de energía 100% renovable, procedente de la planta fotovoltaica El Romero, ubicada en la región de Atacama, Chile.

Con una superficie de captación solar de más de 1,5 millones de m2, “El Romero es actualmente la planta fotovoltaica más grande de América Latina”, según señalan desde Google.

Su localización en el desierto de Atacama permitirá abastecer a Google con hasta 80 MW de energía limpia anualmente.

El suministro de energía renovable para el data center y las oficinas de Google en Chile se engloba dentro de la estrategia de la compañía tecnológica de ser totalmente ecológica.

A finales de 2016 dio a conocer que, desde este año que acaba de comenzar, empleará únicamente energía renovable para sus operaciones globales, que incluyen tanto oficinas como centros de datos.

“El proyecto de El Romero es sólo un ejemplo de nuestro compromiso para lograr el desafío mayor y a largo plazo de suministrar energía a nuestras operaciones las 24 horas de los 365 días del año con energía limpia y cero emisiones de carbono”, añade Arons.

Para llegar a ese objetivo, el gigante de Internet prevé utilizar suficiente energía eólica, solar e hidroeléctrica para cubrir todo su consumo de electricidad a nivel mundial.