Colt ha desembarcado en el mercado asiático con el lanzamiento de Colt Private Wave, una solución diseñada especialmente para empresas que demandan fibra óptica con un elevado nivel de seguridad, rendimiento y conectividad resiliente. La solución estará disponible en Japón, Hong Kong y Singapur.
Hoy en día, las empresas gestionan grandes cantidades de datos sensibles y esto implica un riesgo asociado: las filtraciones de datos se producen cada vez más frecuentemente, ya sea de forma accidental o maliciosa, y provocan un gran daño a las empresas. En este sentido, Colt utiliza la plataforma WDM (Multiplexado por división en longitudes de onda) y proporciona protección y control operacional. Además, aporta la encriptación óptica, lo que permite que tanto la red como el tráfico que se genera en ella esté encriptada, con independencia del tipo u origen de datos generados. Así se gestionarían los riesgos que conlleva el entorno digital actual. Esta encriptación está disponible para entornos estándar optical y cubre las opciones respaldadas por Colt Wave y productos de Colt Private Wave, como 10GBASE LAN-PHY y 100Gbps LR4.
Hacer frente a las regulaciones
Tanto en Europa con la GDPR (Reglamento General de Protección de Datos, por sus siglas en inglés), como en Japón con las pautas de seguridad FISC (Financial Industry Information Systems), las empresas se han vuelto muy recelosas respecto a cómo tienen que almacenar y tratar todo tipo de información. Por ello, “Colt ha invertido en proporcionar redes seguras al incorporar la seguridad en el tejido de la Colt IQ Network. La extensión de Colt Private Wave en Asia permitirá a las empresas que puedan continuar centrándose en todo aquello que impulsa el crecimiento de su negocio, con la certeza de que la estructura tecnológica de su organización es segura”, explica Peter Coppens, vicepresidente cartera de productos de Colt Technology Services.
Tal y como apunta el directivo, Colt Private Wave complementa a la Colt IQ Network que, solo en Asia conecta 95 data centers y 6.800 edificios en línea, ascendiendo hasta los 850 data centers y 27.500 edificios en línea si contamos los datos a nivel global.