Tres plantas solares que Aquila Clean Energy y Euder Energy desarrollan conjuntamente, ubicadas en Soria y Palencia, han recibido el Sello de Excelencia para la Sostenibilidad de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) por sus medidas ambientales y sociales.

Estas han sido reconocidas por su integración en el paisaje y por proteger la biodiversidad. El sello también distingue los lazos que las compañías han establecido con la comunidad local para generar un impacto positivo en la región.

María Ganado, responsable de Sostenibilidad de Aquila Clean Energy en España, ha asegurado que “es un honor que nuestro trabajo sea calificado de excelente por una asociación tan importante en el sector. Seguiremos trabajando para contribuir a la transición energética desde el mayor respeto al medio ambiente y de la mano de las comunidades locales”.

Francisco Cornet y Francisco Poblador, socios fundadores de Euder Energy, reciben con gran satisfacción la mención a la excelencia en sostenibilidad para las tres plantas desarrolladas por Euder Energy y Aquila Clean Energy en Matalebreras (Soria) y Páramo de Boedo (Palencia).

Este resultado es producto de una correcta elección del emplazamiento de los proyectos y de un importante esfuerzo de desarrollo durante más de 4 años y, culminando en tal reconocimiento por parte de UNEF.

Con el fin de obtener el sello de excelencia, las instalaciones deben cumplir con requisitos muy concretos que son analizados con exhaustividad para garantizar su cumplimiento.

Estos están relacionados con la creación de empleo local, la tracción de la economía y los convenios con autoridades locales, así como con la integración ambiental de las instalaciones, o el reciclaje de los materiales utilizados tanto en la construcción como en la operación al final de su vida útil.

En este sentido, estas tres plantas cumplen con todas las exigencias y han conseguido unirse a un pequeño grupo de proyectos que han recibido esta certificación de sostenibilidad social y ambiental.

En concreto, se ha fomentado el empleo local en Matalebreras, el municipio donde se están tramitando las plantas, con un curso gratuito de formación en ofimática. Así, se ha aumentado el impacto socioeconómico positivo de la actividad de la compañía, dando nuevas oportunidades a sus habitantes.

A nivel ambiental, la planta contará con un vallado cinegético que permitirá pasar la fauna local, así como con una pantalla vegetal y cajas nido para aves rapaces en localizaciones adecuadas, tanto dentro del parque como en los alrededores. También se crearán dos majanos -agrupaciones de rocas- con piedra natural para el fomento del mochuelo europeo.

Además, se plantarán ejemplares de encina y majuelo, así como teselas interiores de endrino, salvia, aulaga y rosa silvestre para aportar alimento y refugio a la fauna local en el entorno de la planta.

Por su parte, en la planta de Páramo de Boedo se sembrarán plantas autóctonas bajo los paneles fotovoltaicos y árboles como el melojo y el fresno. Además, se destinarán 21 hectáreas a un plan agroambiental para el que se establecerán áreas de cultivo de cereal (o barbecho) que ayudará a la conservación de aves esteparias en la zona.

Las instalaciones, con una potencia de 152 MW en total, crearán alrededor de 532 puestos de trabajo y producirán energía suficiente como para abastecer a 74.000 hogares, evitando la emisión de 73.000 toneladas de CO2 al año.

Las plantas se encuentran en fase de desarrollo tras haber obtenido la declaración de impacto ambiental positiva (DIA) en enero de 2022 y la autorización administrativa previa (AAP) unos meses después.


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