Ver on-demand
Hard Rock Hotel Riviera Maya

DCD>Talks - Extinción de incendios como parte de la estrategia de gestión de riesgos para los centros de datos con Vasily Uglov, Alliance Specialized Systems

Diferentes riesgos pueden ser perjudiciales para el funcionamiento de los centros de datos, desde un ataque cibernético, pasando por cortes de energía o un incendio, siendo el fuego uno de los escenarios potencialmente más devastadores. Para prevenir y controlar estos riesgos, se deben de analizar los posibles escenarios.

Es necesario incorporar la filosofía del control integral de riesgos en todo el proceso de diseño del centro de datos. El diseño arquitectónico y estructural deberán de incorporar la protección pasiva, los diseños intrínsecos de las instalaciones electromecánicas, deberán de incorporar los diferentes elementos de seguridad que prevengan la generación y propagación de incendios.

Se deben diseñar los diferentes sistemas para trabajar en forma conjunta: los sistemas de gestión de energía, HVAC, control de emisiones, detección, alarma y supresión de incendio, así como las estrategias del personal de respuesta; todo forma parte de un ecosistema integral, que minimiza el riesgo de interrupción del negocio. Los diferentes escenarios de riesgo deben también minimizar la incidencia de falsas alarmas que pudieran causar descargas en falso que interrumpan la continuidad del negocio.

Las diferentes tecnologías son solo herramientas, y el deber de los ingenieros de seguridad contra incendios es crear una solución holística para cada cliente, estar preparados para diferentes escenarios de riesgo y minimizar el tiempo de inactividad potencial. El sistema de extinción de incendios con agua nebulizada a alta presión HI-FOG es la solución óptima, ecológica y libre de huella de carbono utilizada para mitigar los riesgos de incendio en todas las áreas que componen los centros de datos.

Este sistema descarga una nube de agua nebulizada formada por microgotas de agua que saturan el ambiente de humedad. Cuando las pequeñas microgotas se evaporan, absorben una gran cantidad de calor que provoca una disminución drástica de la temperatura ambiente. La nube de agua, al mezclarse con el aire, contiene energía radiante, impidiendo la propagación del fuego y al mismo tiempo humedece y sofoca las llamas en la superficie del fuego. Los gases y humos producidos por la combustión se precipitan, limpiando el ambiente. Estos sistemas utilizan de 7 a 10 veces menos agua que los sistemas tradicionales de rociadores automáticos, lo que minimiza los daños colaterales de mitigación de incendios causados ​​por el derrame de agua, ya que la mayor parte del agua se evapora.